Panecito del barrio La Bolsa...

¡¡Vamos a desayunar!!...  vengase vamos a comer algo exquisito... comida de tradición, rica y barata.

Nada más delicioso  que un par de panecitos con frijoles bien fritos y hasta con un picantito, mantequilla o queso... con eso basta pero si además le quiere agregar huevo... pues también póngale.

¿El café?... ¡huy Dios!.  Es igual al que hace nuestra madre... y lo más rico es el ambiente.

Estamos hablando de Panecitos Juanita o los Panecitos del barrio la Bolsa, ubicado en el corazón de ese  barrio en Comayaguela... allí cerquita del Hospital San Jorge.

Este es un encantador lugar lleno de historia y tradición  que ha trascendido como los famosos e inigualables panes de la bolsa

Éste es un puesto de comida que de generación en generación ha enamorado a todos los capitalinos amantes de lo tradicional y del buen comer.

Desde 1954 la pequeña y antigua casa abre sus puertas en horario de 7 a 12 del día... y al ingresar sentimos  el agradable olor a frijolitos y café que rapidamente hace efecto en nuestros estómagos.

Unas seis banquitas,  bajo la frescura de un frondoso árbol que ha quedado dentro de la casa es el ambiente que aguarda mientras las descendientes de doña Juanita preparan el manjar que pronto degustaremos

En la pequeña cocina un fogón ardiendo guarda el secreto de la familia... el misterio de como preparar los frijoles.  Un secreto que lleva con ellas por más medio siglo y allí se quedará....

Según las jóvenes que atienden el local la magia inicia cuando la leña empieza a arder... la preparación de los frijolitos y  luego   dejar que los panes se tuestan hasta que quedan deliciosos

Todos los que van por primera vez se enamoran y no dejan de visitar este lugar..  lo mejor es que mantiene ese saborcito que desde el primer día  doña Juanita le impregnó.

Manos privilegiadas porque esos panes saben a gloria